Bibliografía - ¿Qué estáis haciendo con la Universidad?

 

- ¿Qué estáis haciendo con la Universidad? Marginación de la Ciencia en la selección del profesorado
Alfonso Serrano Gómez, Prof. Emérito de Derecho penal y Criminología
Diario La Ley, Nº 9910, Sección Doctrina, 10 de Septiembre de 2021

Da la impresión de que los partidos que han venido «gobernando» en nuestro país han rivalizado para ver quien devaluaba más el sistema educativo y la Universidad, que ha sido mucho. No han sabido o no han querido valorar —creo que las dos cosas— la importancia que la educación tiene para el desarrollo del país. Parece que no les importa, mientras que la Universidad sigue su camino decadente.
Hace casi cuarenta años que se viene hablando de hacer una profunda reforma de la Universidad, que no llega, ni se le espera. Desde entonces la situación no mejora, sino todo lo contrario. Con la Ley de Reforma Universitaria de 1983 se perdió la oportunidad de iniciar el cambio. Sin embargo, no fue así, y las disposiciones legales posteriores han venido agravando los problemas. Ni a corto, ni a medio plazo, hay esperanzas de revertirlos. Una gran desazón se extiende por todos los estamentos interesados con la Universidad: profesores, estudiantes y la sociedad en general, que no reaccionan, aceptando la situación de declive. Tampoco hay que esperar nada de los partidos políticos, saben que cambios importantes en la Universidad llevarían consigo huelgas y manifestaciones, que no están dispuestos a soportar, pues pueden restarles clientela electoral.
La selección del profesorado universitario no ofrece garantías. Antes de poder presentarse a un concurso hay que superar un proceso previo de selección —acreditación—, controlado por la ANECA. Unas Comisiones de profesores deciden quienes podrán participar en la fase posterior de los concursos para conseguir una plaza de funcionario como catedrático o titular. El sistema está desacreditado por diversas razones, entre ellas que es frecuente que los componentes de la Comisiones de acreditación y revisión no estén capacitados para resolver desde el terreno científico-técnico, pues deciden sobre materias en las que no son expertos.
Para conseguir una plaza de catedrático o titular en propiedad los acreditados han de participar en los concursos que convocan las universidades. Lo normal es que se convoque una plaza cuando en la misma hay algún aspirante. Pues bien, será éste, junto con sus compañeros de departamento, los que elijan a todos los miembros del tribunal que ha de juzgar el concurso. Normalmente se presentará solo. Es poco probable que concurra alguno más, pues dudarán de la imparcialidad de los que forman el tribunal.